Dos vías para llegar al mismo resultado. Optar por Windows o Linux es, en gran medida, una elección personal, ya que a nivel de funcionamiento ofrecen cosas muy similares. Sin embargo, difieren en términos de precio (Linux es gratuito, mientras que Windows implica un desembolso de cuantía variable), complejidad de uso, adaptabilidad, o su resiliencia operativa.
Linux: ¿Usamos cosas como PHP, Perl, Python u otros lenguajes basados en Unix? Linux lo va a gestionar todo sin un titubeo. La compatibilidad con bases de datos MySQL y PostgreSQL es la norma, y no la excepción.
Windows: Es una perogrullada, pero Windows va como una seda si empleamos otras tecnologías de… exactamente: Windows. Cosas como los scripts ASP o .NET indican el uso de este sistema operativo, que ofrece soporte para Microsoft SQL Server o aplicaciones como Access.